lunes, 23 de marzo de 2009

83. Abjasia (I)



Sukjumi, en Abjasia, a orillas del Mar Negro, un paraiso turistico actualmente sub explotado por culpa del conflicto
Siguiendo un orden crono logico y geografico, la siguiente entrada tendria que ser sobre Georgia, pero me lo salto y os pongo en la estacion de Tiblisi en un tren a las 10 de la noche camino de Zugdidi, en la parte oeste de Georgia. Es facil imaginarse la escena: tren diesel de la epoca sovietica, cristales sucios, un olor a tufo que tira de espaldas, tipica senora caucasica vendiendo comida de dudosa fecha de caducidad, dos literas y casi 9 horas hasta llegar al otro extremo del pais. Llegamos a Zugdidi, noche cerrada a las 6 de la manana, lloviendo. Al cabo de unas horas seguimos camino hasta la frontera. A partir de ahora, empieza la aventura. Tardamos casi una hora en cruzar "el puente" que es como los locales llaman a la frontera. Y como vamos a cruzar la frontera... os tendre que contar donde estais entrando.


Haciendo amigos con el tractor donado por ACH a las comunidades en esta zona del Caucaso. 10 agricultores utilizan este tractor de 8.000 euros que se tuvo que comprar en Rusia, unico pais que abre sus fronteras (por interes) a los abjasos

Estais entrando en Abjasia. No lo busqueis en la lista de naciones miembros de Naciones Unidas. Ni como Estado reconocido por la comunidad internacional. (salvo Rusia, claro). Abjasia es sobre el papel, una parte del territorio georgiano. Fisicamente, en el extremo oeste del pais, la mayoria de esta region esta habitada por abjasos y Georgia la considera parte de su territorio, pero a efectos practicos... acabamos de dejar Georgia. Los georgianos no pueden entrar en el territorio (salvo los que viven a los dos lados de la frontera). Es decir, la policia georgiana, las autoridades no pueden entrar en su propio territorio. Las carreteras, los coches, los impuestos, el idioma, la electricidad, la moneda, el telefono...todo es diferente a Georgia. Las carreteras tienen mas agujeros que un queso de gruyere y la vida es, salvo en su capital, Sukjumi, un retorno a la edad Media. Abjasia y sus habitantes se consideran un estado totalmente independientemente, y tienen bastantes motivos para pensar asi. Si un abjaso cruza "el puente" los georgianos le pediran explicaciones que quiere hacer en el otro lado y si vuelve, es posible que la policia abjasa (o su rudimentario ejercito) le pregunte si es un espia. Unos y otros se miran con recelo.

Mis cuatro frases en ruso me han grangeado la amistad automatica de la poblacion abjasa... frases que me he tenido que reservar en Georgia, porque aunque el ruso es la lengua vehicular de la zona, la gran Madre Patria sigue siendo el gran oso dispuesto a comerse a Georgia. La siguiente entrada tiene que ser por el origen del conflicto y hacia donde va esta parte del planeta.

Una pequena fiesta a las 11 de la manana: pollo, tortilla, pasteles, pan, vino... y un buen vaso de vodka. Imposible negarse


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