Hubiese escrito más a menudo sobre ellas pero la petición de discreción de Médicos sin Fronteras, estrategia muy común en caso de secuestro hicieron que no publicase más. Y por eso mismo, porque en la nota de su página web piden un respeto a su privacidad para que se adapten a su vida en libertad este va a ser el tercer y último post dedicado a ellas.
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| Imagen tomada de la página web de MSF |
Una privación de libertad tan injusta y en el contexto en que se produjo, desarrollando una labor humanitaria, solo puede llevar a la mayor de las repulsas. Hay quien afirma que el personal humanitario que desarrolla su trabajo en países donde el riesgo existe debe asumir y aceptar ese riesgo sin chistar. Eso es tan absurdo como pensar por ejemplo que hay que asumir los accidentes de coche sin inmutarse.
El trabajo humanitario es necesario. Será más eficiente, menos, justificado o no, sostenible o perecedero, práctico o inútil. Tendrá más o menos impacto y las organizaciones serán en unos casos más o menos profesionales. Pero los trabajadores humanitarios sabemos que hay que llevarlo a cabo y no deberíamos sufrir el riesgo de una privación de libertad como la que han sufrido Mone y Blanca.
Me acuerdo ahora también de las personas (de las cuales conozco muy bien a una) de Médicos sin Fronteras que han trabajado por su liberación. Creo que ni siquiera puedo imaginar lo que estará viviendo en este preciso momento, horas antes de que lleguen a casa. Un abrazo grande para él.
Felicidades a sus familiares por re encontrarlas, a MSF, a toda la comunidad humanitaria
y
feliz
viaje
de
regreso
a
la
VIDA
1 comentario:
Molt emotiu JJ / Muy emotivo JJ!
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