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| Calles de Bangui. Enero 2017l |
La sorpresa más agradable que uno tiene cuando circula por la capital (y ese es un gran cambio respecto al año pasado) es que han desaparecido casi todas las tanquetas y vehículos blindados que recorrían las calles hace un año.
Sigue habiendo vehículos militares y esporádicamente nos cruzamos con algunos de ellos pero nada que ver cuando hace un año, meses después de las elecciones que llevaron a Touadera al poder era normal ver gente armada por la calle.
Bangui ha recuperado la alegría de vivir se han reabierto comercios y restaurantes, las calles registran una animación desconocida.
La policía nos paró el otro día, gente amable que tras ver que no llevabamos nada sospechoso nos dejó ir sobre todo cuando dijimos que "Sango ketekete", es decir que nuestro Sango, el idioma local, mejora poco a poco.
Las malas noticias están en el interior del país. Los grupos armados se han estabilizado en sus zonas y en los puestos fronterizos se registran enfrentamientos. Para más inri, algunos de ellos de la misma ideología, los ex Selekas se pelean para controlar unas zonas u otras.
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| Notre Dame. Bienvenida al Arzobispo que venía de Roma |
Otra mala noticia son las incursiones de facciones del LRA, un grupo armado que cruza la frontera del Congo para desestabilizar la zona o aprovechar las minas de diamantes.
Como siempre, es la población la que sufre estos enfrentamientos.
El gobierno, desgraciadamente, sigue sin tener una capacidad para imponer la ley y la sensación que el país sigue dividido.
En los próximos días, más
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